Consejos para cuidar las chaquetas de moto
Hay diferentes tipos de chaquetas de moto en función del material utilizado para su confección: las de piel, las de tejido cordura sintética o las de lona de algodón encerado. En cada caso se recomienda un proceso de lavado y secado distinto.
Chaqueta de piel
Si la chaqueta es de piel no se puede lavar a máquina ya que perdería todas sus propiedades y color, si está muy sucia se debe llevar a un experto para que realice el tratamiento óptimo. Si solo es necesario realizar una limpieza superficial, se puede utilizar una toallita de bebé húmeda, se recomienda una vez seca, aplicar un poco de crema corporal que hidratará la piel dándole flexibilidad y brillo de nuevo, extender una pequeña cantidad por toda la superficie, repartiéndola bien para que no queden trazas.
Chaqueta sintética
Si la chaqueta está confeccionada con tejido de cordura sintética se puede lavar a mano con Norit Mano, en agua templada y una esponja suave para frotar el tejido exterior eliminando la suciedad acumulada. Se deja en remojo durante 20 minutos, se enjuga con agua fría para eliminar todo el detergente y se seca al aire en plano. Se debe secar por ambos lados y dando la vuelta a las mangas cuando el exterior está seco. Es probable que el tejido exterior tenga un acabado repelente al agua que se puede volver a activar planchándolo a temperaturas bajas.
Chaqueta de lona
Si está confeccionada con tejidos tipo lona encerada se puede lavar a mano y también en la lavadora, con un detergente neutro como Norit Máquina que respeta los tejidos y cuida las fibras, seleccionar un programa delicado y agua fría.
Tras el lavado, habrá desaparecido la cera superficial que impermeabiliza la prenda, es necesario remplazarla utilizando una cera especial para tejidos tipo lona. La prenda debe estar completamente seca antes de aplicar la cera siguiendo los pasos que indica el fabricante de cera. También se puede llevar la prenda a un especialista para que aplique la cera.
Es aconsejable guardar las chaquetas de moto utilizando perchas robustas, que mantengan la forma y si va estar almacenada mucho tiempo, utilizar una funda de trajes de tela, nunca una bolsa de plástico, que la proteja.
